No te alejes de Dios, que el diablo nunca duerme.

15 agosto 2007

La silla


La hija de un hombre le pidió al pastor que fuera a su casa a hacer una oración para su padre, que estaba muy enfermo. Cuando el pastor llego a la habitación del enfermo, encontró a este hombre en su cama con la cabeza alzada por un par de almohadas. Había una silla al lado de su cama, por lo que el pastor pensó que el hombre sabía que vendría a verlo. -Supongo que me estaba esperando- le dijo. No, quien es usted?- respondió el hombre. -Soy el pastor que su hija llamó para que orase con usted; cuando ví la silla vacía al lado de su cama supuse que usted sabía que yo vendría a visitarlo. -Ah si, la Silla- dijo el hombre enfermo -¿Le importaría cerrar la puerta? El pastor sorprendido la cerró. -Nunca le he dicho esto a nadie, pero toda mi vida la he pasado sin saber cómo orar. Cuando he estado en la Iglesia he escuchado siempre al respecto de la oración, que se debe orar y los beneficios que trae, pero siempre esto de las oraciones me entró por un oído y me salió por el otro, pues no tenía idea de cómo hacerlo. Entonces hace mucho tiempo abandoné por completo la oración. Esto ha sido así hasta hace unos cuatro años, cuando conversando con mi mejor amigo me dijo: José, esto de la oración es simplemente tener una conversación con Jesús. Así es como te sugiero que lo hagas: Te sientas en una silla y colocas otra silla vacía frente a ti, luego con fe miras a Jesús sentado delante de tí. No es algo alocado el hacerlo pues El nos dijo: "Yo estaré siempre con vosotros". Por lo tanto, le hablas y lo escuchas, de la misma manera como lo estás haciendo conmigo ahora". Es así que lo hice una vez y me gustó tanto que lo he seguido haciendo unas dos horas diarias desde entonces". Siempre tengo mucho cuidado que no me vaya a ver mi hija, pues me internaría de inmediato en un manicomio. El pastor sintió una gran emoción al escuchar esto y le dijo a José que era muy bueno lo que había estado haciendo, y que no dejara de hacerlo. Luego hizo una oración con él, le extendió la mano y se fue a su casa. Dos días después, la hija de José llamó al pastor para decirle que su padre había fallecido. El pastor le preguntó: ¿Se marchó en Paz ? -Sí, cuando iba a salir de la casa a eso de las dos de la tarde me llamó y fui a verlo a su cama. Me dijo lo mucho que me quería y me dio un beso. Cuando regresé de hacer compras una hora más tarde lo encontré muerto. Pero hay algo extraño al respecto de su muerte, pues aparentemente justo antes de morir se acercó a la silla que estaba al lado de su cama y recostó su cabeza en ella, pues así lo encontré. ¿Qué cree usted que pueda significar esto?
El pastor se secó las lagrimas y le respondió: Ojalá que todos nos pudiésemos ir de esa manera...





5 comentarios :

Lizeth dijo...

¡Que bendiciòn! Es asì como quisera irme yo tambien. No solo en el momento de salir de este mundo sino cada día, que rico serìa estar aunque sea un momento asì con El. ¡Que paz!, esa que sobrepasa todo entendimiento.
Dios te bendiga.

Silvia dijo...

No solo el pastor se secó las lagrimas Dany, yo tambien.:´]

Oye desaparecidote, donde te metes?? Hace mucho que no platicamos.
A ver si alguno de estos días te encuentro perdido por allí ratoncito.

Manlio Hector dijo...

Mi amado viejo! con el sincero anhelo de mi corazón de que estes gozando de paz y justicia con toda tu amada familia.
Es mi gran anhelo también encontrarme con mi Señor de esta manera,será maravilloso cuando El venga por nosotros,individualmente ó todo su pueblo.
Pero cerrar los ojos a esta vida,recostado en su regazo,cuan hermoso ha de ser!

Asesor Homeschooling para Chile dijo...

...Abrazado a Jesús! Que maravilla más grande.
Qué cierto, jamás debemos olvidar que Él está con nosotros aquí y ahora.

Gracias por recordarnos esta reflexión, mi hermano.

Un abrazo.
¡Muchas bendiciones!

Salmistas De Sion dijo...

Estimado hermano,
gracias por tus buenos deseos, te saludamos en el Nombre del Señor y agradecemos la cadena de internet, esperamos que este contacto siga produciendose y que El Señor bendiga tanto tu hermoso trabajo como el de todos los que comparten contigo en esta maravillosa obra.
salmistasdesion@hotmail.com